Es curiosa la analogía entre la caída de las hojas secas de los árboles en otoño y la caída del pelo de las personas durante esta estación. Nada más lejos de la realidad, es totalmente cierta. Esta época es, por excelencia, la preferida por el cabello para cambiar y renovarse. Muchos profesionales del sector, especialistas en el estudio de este y otros fenómenos relacionados, insisten en que es un proceso natural y que no conviene alarmarse si, al despertar, vemos nuestra almohada con más pelo del habitual o si hemos llenado el filtro de la ducha.
Lo que dice la ciencia es que volverán a nacer transcurridos unos meses sin tener que aplicarnos vitaminas o lociones anticaída. Aunque sí que es cierto (https://www.abc.es/20120217/sociedad/abci-evitar-caida-pelo-201202161815.html) que hay algunos métodos que se han probado útiles o, por lo menos, detractores de este proceso puramente estético que en general afecta a hombres, pero que también puede tener incidencia en algunas mujeres.
El caso de los bebés es muy curioso, ya que a los cinco meses de haber nacido, suelen perder esa pequeña capa de vello que recubre sus cabezas para ser reemplazado por los primeros pelos con algo más de vigor. Desde ese momento inicial, en nuestra vida iremos pasando las fases de regeneración poco a poco y en periodos irregulares que no deben asustarnos. Para hacerse una idea, los cabellos tardan alrededor de tres meses desde que “mueren” hasta que, definitivamente, se acaban cayendo.
Es cierto que esta pérdida es más acusada durante el otoño y eso tiene que ver con el ciclo natural del nacimiento y crecimiento del pelo. «En general, el pelo muere en primavera, aunque suele tardar tres meses en caerse y no hay que olvidar que si un pelo muere es porque hay otro detrás empujando para nacer.
En los últimos años, coincidiendo con el cambio climático, sí hemos visto cómo la muda se adelanta un poco, a los meses de agosto-septiembre», explica Ramón Grimalt, profesor de Dermatología en la Universitat de Barcelona y miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) en un reportaje del ABC (https://www.abc.es/sociedad/20131001/abci-caida-cabello-otono-201309301326.html)
En esa entrevista además aclara: «Ocho de cada diez personas que acuden a consulta en estas fechas no tienen ninguna enfermedad, sólo están asustadas por quedarse calvas». Así que, lo importante en estos casos es, sobre todo, mantener la calma.